Nuestros nuevos retos laborales para el futuro

Renovarse en el mercado de trabajo

En la situación actual hay que renovarse laboralmente y plantearse nuevos retos laborales y en el estudiar está la fórmula para buscar un nuevo empleo y darle un giro a nuestro futuro laboral.

Muchos se empeñan en seguir buscando trabajo en lo que en su día estudiaron y ven que no encuentran una salida laboral, por ello es necesario valorar nuevamente cuales son las necesidades del mercado y pensar en orientar nuevamente su formación siendo realistas.

Para empezar tenemos que averigua cuáles son las barreras, prejuicios o incluso sueños que nos están llevando a la inacción, esto es fundamental para empezar con la evaluación de lo nuevo que queremos estudiar. Tras la evaluación, tenemos que tomar una decisión que ilusione. No se trata de hacer cursos para engrosar el currículo sino formarse con inteligencia. Hay que tener paciencia y no avergonzarnos por los nuevos objetivos que vamos a lograr. Con esto quiero decir que no nos ridiculicemos pensando en que hayamos estudiado una carrera universitaria y ahora nos planteemos estudiar un ciclo formativo. También podemos pensar en que nos sintamos muy lejos del perfil profesional que nos gustaría tener pero, liberémonos de esas ideas negativas que interrumpen el proceso de nuestra nueva formación y tengamos paciencia y pensemos en lo que conseguiremos al final del camino. Tomemos el estudio por el placer de aprender.

Un mercado laboral más exigente

El mercado laboral se está poniendo más exigente y es necesario que nos endurezcamos estando formados, capacitándonos para nuestra vuelta a la búsqueda activa de empleo.

Cristina Pérez, psicóloga dice que nos olvidemos de la edad que tengamos ya que el estudio se puede retomar en cualquier momento de nuestra vida, “si llevamos tiempo sin estudiar es posible que al principio nos cueste mantener la concentración y retener la información, pero al cabo de un tiempo esta capacidad se verá notablemente mejorada.” Es importante tener siempre en mente porqué se estudia y los beneficios que aporta. Pero sobre todo es importante disfrutar del proceso, disfrutar del aprender a cada instante no olvidándonos del fin último que noes otro que volver al mercado laboral renovado.

Como ejemplo a todo lo que he escrito anteriormente les hablo de Carlota, una joven que estudió Magisterio y con 32 años sus únicos trabajos han sido como dependienta e impartiendo clases particulares en su casa. En la actualidad estudia un Ciclo Formativo de Grado Medio de Auxiliar de Enfermería. Sintió esa vocación cuando tenía que hacerse cargo de su abuela cuando su madre no podía. En estos momentos está en periodo de prácticas y en junio finaliza. Me comenta que cuando finalice tiene pensado emprender. Trabajar por cuenta propia cuidando a personas mayores en sus domicilios. ¡Le deseo toda la suerte del mundo! Este es un caso próximo a mí pero ¿cuántos de nosotros no nos hemos planteado cambiar el rumbo de nuestra vida laboral poniéndonos a prueba formándonos a corto plazo en otro campo?

¡Cuéntame tu cambio! Yo estoy en ese proceso de averiguar cuáles son las barreras que no me dejan avanzar